La Historia
CUARTO PERIODO
El Siglo XX: La Búsqueda del Desarrollo Económico y de Justicia Social
LÍMITES TEMPORALES
Desde la elección de Arturo Alessandri Palma (1920)
Hasta nuestros días.
CARACTERÍSTICAS Y PROCESOS
* Fragilidad de la democracia como sistema político.
* Ampliación de los derechos ciudadanos y de la participación política a través del sufragio.
* El cobre como pilar de nuestra economía.
* El protagonismo del Estado y de los capitales extranjeros en el desenvolvimiento económico.
* Modificación de la estructura de propiedad de la tierra a través de la Reforma Agraria.
* Persistencia de los problemas y desigualdades sociales y atropellos a los Derechos Humanos.
* Influencia cultural y política de los Estados Unidos.
* Generalización de un modo de vida urbano.
* Las intervenciones militares (1924-1932).
* Vigencia del modelo económico de Industrialización por sustitución de Importaciones (décadas 1930-1960).
* Incorporación de la mujer a la vida política y al trabajo remunerado La Unidad Popular (1970-1973).
* El régimen militar de Augusto Pinochet (1973-1990).
* Adopción de un modelo econ6mico neoliberal (desde 1975).
* La transición a democracia (desde 1990).
DESCIPCIÓN GENERAL
Este cuarto periodo está atravesado por algunos sucesos que dejaron una marca mayor en nuestra historia: la crisis de los anos '30 y la ruina de la industria salitrera, el Frente Popular, los movidos años '60, la Unidad Popular y el régimen militar que la abortó, son hitos que explican en parte la manera de actuar de los chilenos de hoy. Por lo tanto, su estudio le permitió verificar directamente la diversidad de interpretaciones que se producen frente a un proceso histórico.
El siglo XX se caracterizó por la búsqueda de un mayor desarrollo económico y la lucha por la igualdad social. Actores clave frente a estos desafíos han sido el Estado, las organizaciones sociales, los partidos políticos y el pueblo chileno en general. Se lograron niveles crecientes de participación política entre la población, en un marco democrático, que fue interrumpido por el régimen militar entre 1973 y 1990.
Proyectos de la más variada índole se disputaron el poder y el respaldo popular. La nomenclatura más utilizada entre los historiadores es la que distingue a grandes rasgos entre los proyectos de izquierda (influidos por las ideas socialistas, propugnaban una participación popular y cambios revolucionarios, ya fuera por la vía democrática o armada), de centro (con apego al humanismo cristiano y al capitalismo, abogaban por cambios graduales sustentados en consensos ciudadanos y mecanismos democráticos) y de derecha (con rasgos autoritarios, populistas y conservadores en lo moral, buscaban cambios paulatinos integrando tradición y modernidad). Los enfrentamientos entre estos proyectos llevaron a años de divisiones internas que aún se perciben en Chile.
Lo que hoy se rescata de este periodo, es que hubo importantes logros, como la creciente participación ciudadana, la igualdad de derechos entre hombres y mujeres, la educación y las expresiones artísticas. Pero, sin desmerecer los avances, el desarrollo económico y la justicia social siguen siendo temas no resueltos que las nuevas generaciones de chilenos deben enfrentar desde ya.
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El Siglo XX, la Búsqueda del Desarrollo Económico y de la Justicia Social (1920 en adelante)
El Siglo XX, la Búsqueda del Desarrollo Económico y de la Justicia Social (1920 en adelante)
Los temas del desarrollo económico y la justicia social, junto al fortalecimiento de la democracia politica, serán las grandes y permanentes preocupaciones del siglo XX en Chile. Hasta nuestros días, en que se inicia el siglo XXI, esta búsqueda de mayores equilibrios sociales y políticos, en el marco de un país que se desarrolla económicamente, daría lugar a profundos cambios.
La salida a la crisis económica, política y social de los años veinte -crisis expresada en el fin del ciclo del salitre, el agotamiento del régimen parlamentario y en la falta de participación de los sectores populares y medios- se la buscó explorando nuevos sistemas de organización política y económica.
En lo político, una nueva reforma constitucional -expresada en la Constitución Política de 1925- renovaría un sistema democrático en que la figura del presidente recobró fuerza, acompañado eso si de un sistema de partidos con capacidad de representar la real diversidad social y cultural que cobijaba la sociedad chilena.
En lo económico, la doblemente golpeada economía primario exportadora -primero por la crisis del salitre y luego por la crisis internacional de 1929 dio paso a un nuevo impulso de desarrollo económico, esta vez basado en la capacidad de producción interna: el país reforzó así el camino de su industrialización.
En lo social, el Estado asumirá un activo rol buscando crecientes grados de integración social, económica y politica de la población, cumpliendo así la función de extender los beneficios del desarrollo a nuevos grupos sociales.
Culturalmente, la mayoría de la población hizo suyos los valores democráticos predominantes, expresándolos en el ejercicio consciente de sus derechos políticos y sociales. La constante búsqueda de mayores niveles de desarrollo económico y de justicia social y la existencia de un sistema político que permitía la alternancia en el poder a través de elecciones libres y periódicas, hizo posible la formulación y competencia entre proyectos de desarrollo alternativos. Estos proyectos, iniciados los sesenta del siglo XX, coincidían en la necesidad de introducir nuevos y estructurales cambios en la realidad del país.
Durante el régimen militar que se inicia el 11 de septiembre de 1973, en un contexto autoritario y de privación de derechos políticos y sociales, y que ocupa buena parte de años 70 y 80, se verifican en el país nuevos cambios estructurales a nivel y en el rol del Estado. La economía se liberalizó, dejando su regulación a la oferta y la demanda y abriéndose a los mercados internacionales.
El abandono su rol benefactor, reduciendo su tamaño, su patrimonio y su capacidad de intervenir regulando la vida económica y social, como lo había hecho desde los años 30 hasta los 70. Estos cambios fueron acompañados por un nuevo marco constitucional, expresado en la Constitución Política de 1980.
La misma Constitución de 1980 preveía la posibilidad del término del régimen al contemplar un plebiscito que decidiría sobre su continuidad. Así, en 1988 el país opta per elecciones presidenciales abiertas, que marcan el fin del régimen y el inicio de un proceso de transición hacia una democracia plena. En la década noventa, sobre la base de las transformaciones económicas de los años precedentes, en el marco de un modelo económico neoliberal, el país logro un importante y sostenido crecimiento económico, aunque con fuertes desigualdades internas.
El fin del siglo XX cierra cronológicamente este cuarto periodo, pero no así lo que ha sido su principal preocupación: la búsqueda del desarrollo económico y la justicia social. Tarea aun pendiente para el siglo XXI.
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